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Documentar

 La mirada hacia atrás es una caja del tesoro, que solo puede ser abierta con la llave de tu corazón, aquella que se crea al conectar tu yo de ayer con tu yo de hoy; se forma cuando la escencia que te habita, vibra en sincronía con los pedacitos que has ido creando día a día, por eso, hoy más que nunca puedo asegurar la vital importancia de documentar todo, si, absolutamente todo lo que hoy haga que tus palpitaciones aumenten, que tus latidos se sientan con tan solo un poco de silencio, mil veces puedo replicar, que vale mil por diez la pena. 

Vivimos en un solo tiempo, pero dividido en dos espacios, aquel real y aquel digital, en ocasiones parece el uno estar condicionado al otro, pues la aceptación y aprobación en ambos lugares es un deseo, sin embargo, no siempre estos son equivalentes; entonces, no renuncies a expresarte: Crea, escribe, inventa, dibuja, describe, busca canciones, deja huellas de tu pasos, por qué sabes, a veces, para regresar y conectar con tu alma, es preciso escuchar, leer, oler, tocar o saborear algo que te convezca que todo está bien como lo estuvo hace unos ayeres, y que eres el resultado de grandes aciertos, para hacerla más clara, es algo así como el cuento de Hansel y Gretel, al caminar hacia el bosque van dejando migajas de pan en el suelo para conocer el camino de regreso. 

En el mundo humano me gusta pensar que lo que dejamos son huellitas, no de pan, pero si de amor, de alegría, de sensaciones únicas al descubrir una canción, al descargar en letras las emociones. 

Tengo que confesar que no todo lo que he querido lo he compartido, pero, con más fervor hoy me felicito y me re-abrazo, por lo sí hecho, pues cada vez que lo tengo enfrente, no me queda más que re-descubrir que la vida es un regalo lleno de magia, que cosas buenas hubieron atrás y habrán adelante, y que sobre todo ya las hay hoy.

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