Dos años atrás, un día como hoy, el vuelo había emprendido, aquel por el que tanto espere, el cual a veces se veía tan lejano y en otras simplemente parecía que nunca iba a llegar, pero me aferraba tanto que aunque en ocasiones la fe ya no alcanzaba, la exactitud del tiempo me obligaba a persistir y nuevamente la fe se volvia a encender. Palabras más exactas para agradecer y expresar todo lo que ha sido estos tiempos sería tan simple o tan difícil como quisiera, un camino del cual pensé que no saldría viva y es que llegan momentos en que sientes que no hay más que dar, en qué creer que las cosas van a mejorar es irrealizable, ya no eres, un día estás, y al otro solo tu presencia física. Tantas cosas que se pueden nombrar al regresar la vista atrás, pero por hoy, me quedo con el enorme agradecimiento a la vida, por permitirme experimentar este paso por la tierra, por sostenerme, por abrazarme, por quererme, cuidarme, acurrucarme, por el amor, por la familia, por la salud, por la ge...
El gusto por caminar y aprender...