Aquel placer de elección es un auto-regalo, el sentir después de varios episodios de mi vida la conciencia de elección, ha sido un viaje lleno de altibajos, cuán difícil ha sido cuestionar las creencias, desde el más pequeño "debería", explorar en ti, darte el permiso y la oportunidad de autoconocerse y observar que hay, comprender que existen etiquetas para ciertos eventos, dejar de generalizar, una frase es como un par de zapatos, no a todos gusta, ni a todos les queda el mismo número, y no siempre puedes usar el mismo par para todo.
Que la valentía y la franqueza sensata sean tus grandes compañías, cuando hagas algo, no importa que parezca, si la motivación y el para qué es genuino, date la oportunidad de lanzarlo, siempre con prudencia, siempre con amor, siempre respetando y agradeciendo la libertad de elección. Al final la gente va a ver lo que quiere ver, la apreciación del otro no depende de ti; antes huía de esta premisa porque parecía que ahi podía esconderse la cobardía de la reparación y justicia, ahora reafirmo que la sinceridad es conmigo misma, sin engañarse, y he reemplazado coherencia por congruencia.
Elegí a hacia dónde remar, y el deber cumplido guiño su ojo, pero esta vez tenía un mensaje aún más largo, en ocasiones una acción A puede tener un origen X, pero que en el trayecto puede desviarse o simplemente no dar el resultado deseado, más sin embargo, puedes darle un resignificado que te permite avanzar, elegir la envoltura puede ayudar pero eso no cambia el interior de una caja, pero es como cuando caminas y no te gusta el exterior de un regalo, nunca sabes si en la calle puede estar eso que buscas pero con un forro poco común, tratate con amor, y si a veces no se puede cambiar el exterior ten fe en el interior de la caja.
Gracias Universo, Cosmo, Divinidad, Dios, Pachamama por las grandes bendiciones que me permites disfrutar.
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